En el año 1983, y gracias al descubrimiento casual de un mosaico, comenzaron las excavaciones cuyo resultado ha sido el descubrimiento y puesta en valor de uno de los conjuntos monumentales más importantes de la Hispania romana, el formado por la Casa de Materno con sus mosaicos, y los edificios conocidos como el Palatium y el Mausoleo. Todos ellos, fechados a finales del siglo IV, están relacionados con el Emperador Teodosio I el Grande.
Edificio A. Palatium: Se trata de un edificio que aunque construido para un uso civil, pronto debió de pasar a ser utilizado como un lugar de culto y enterramiento. Dicha construcción fue reutilizada a lo largo de la historia, por visigodos y musulmanes. En él destacan las columnas encontradas en mármol, de una sola pieza y traídas expresamente desde las canteras imperiales de oriente, así como elementos decorativos como marfiles tallados con escenas mitológicas, nácares…
Edificio B: MausoleoEstá situado entre la Casa y el Palatium. Es un edificio de difícil interpretación, parece ser un Mausoleo, en donde debieron ser enterrados el dueño de la villa y su familia. Se trataba de un pequeño edificio sobre podio, con un zócalo de granito y cubierto por una bóveda. Su interior estaba pavimentado con mosaico del que sólo se conserva un pequeño fragmento.
Edificio C: Casa de MaternoSe trata de una Casa romana que destaca por su colección de mosaicos. Es un edificio de planta cuadrada con un patio central con peristilo desde el que se accede a las distintas estancias. Se conservan veinte habitaciones pavimentadas con mosaico. Entre los mosaicos destacan los que se encuentran en las habitaciones principales de la casa, con escenas figuradas de héroes y dioses.