LA OLMEDA

Apenas un kilómetro antes de llegar a Saldaña, o uno más allá de esta localidad, según lleguemos desde el sur o desde el norte de la península, y siendo dirección norte, a la izquierda de la carretera, nos dirigimos hacia una de las grandes joyas arqueológicas con las que cuenta la siempre sorprendente Comunidad de Castilla y León: se trata de la Villa Romana de La Olmeda. Ubicada ya en los límites de la Tierra de Campos allá donde comienzan las primeras estribaciones montañosas del norte de Palencia y en el término municipal de Pedrosa de la Vega, renace de entre las antiguas tierras de cereales esta maravilla arqueológica romana del s. IV, descubierta en el año 1.968. Hasta esta fecha permanecía oculta a los ojos de todos cuantos de un modo u otro conocían la zona desde tiempos inmemorables. Fue la casualidad y el esfuerzo del propietario de la finca en la que la villa se ubica la que permitió, en un primer momento, el renacer de la cultura tardo romana en plena tierra de campos. Posteriormente y en la actualidad la Villa está siendo gestionada y promocionada por el Patronato de la Diputación Provincial de Palencia.

La Villa de la Olmeda no es sino un extraordinario "feudo" del que se conservan su edifico principal y los restos de una enorme necrópolis. La mansión refleja el esplendor de la época y de la explotación, así como el refinado gusto de sus moradores. De planta cuadrangular y con patio interior, la villa nos sorprende por la asombrosa variedad de mosaicos llenos de colorido con figuras humanas, medallones, escenas de caza, héroe como Aquiles, motivos florales...

Lo más atractivo de esta villa son la serie de mosaicos que cubren la mayor parte de las habitaciones; elementos geométricos, vegetales y figurativos se combinan y repiten con gran profusión. Destaca entre ellos el bello mosaico de la gran sala de recepciones con tres temas distintos que convierte a la Olmeda en el continente de uno de los más bellos y mejor conservados mosaicos del mundo, para la mayoría de los expertos se trata del más grandiosos mosaico policromado del mundo.

La escena principal con la historia del descubrimiento de Aquiles por Ulises en el gineceo de Licomedes, en la isla de Skiros. Junto a la villa se han hallado enterramientos que corresponden a la Edad de Hierro, bajo Imperio Romano y medievales, en los que se han encontrado numerosos testimonios de objetos de las distintas épocas como monedas, vidrios, terra sigillata hispánica, collares, bronces, sílex, depositados todos ellos en el Museo Arqueológico de la Saldaña.